Loba parda

Este romance me lo enseño mi padre de chico y aún sigue en mi memoria casi completo os lo pongo para que disfrutéis de esta poesía tan bonita.


1. ROMANCE DE LA LOBA PARDA 
Autor: Popular 

Estando yo en la mi choza 
pintando la mi cayada, 
las cabrillas altas iban 
y la luna rebajada; 
mal barruntan las ovejas, 
no paran en la majada. 

Vide venir siete lobos 
por una oscura cañada. 
Venían echando suertes 
cuál entrará a la majada; 
le tocó a una loba vieja, 
patituerta, cana y parda, 
que tenía los colmillos 
como punta de navaja. 

Dio tres vueltas al redil 
y no pudo sacar nada; 
a la otra vuelta que dio, 
sacó la borrega blanca, 
hija de la oveja churra, 
nieta de la orejisana, 
la que tenían mis amos 
para el domingo de Pascua. 

-¡Aquí, mis siete cachorros, 
aquí, perra trujillana, 
aquí, perro el de los fierros, 
a correr la loba parda! 
Si me cobráis la borrega, 
cenaréis leche y hogaza, 
y si no me la cobráis, 
cenaréis de mi cayada. 

Los perros tras de la loba 
las uñas se esmigajaban; 
siete leguas la corrieron 
por unas sierras muy agrias. 

Al subir un cotarrito 
la loba ya va cansada: 
-Tomad, perros, la borrega, 
sana y buena como estaba. 

-No queremos la borrega 
de tu boca alobadada, 
que queremos tu pelleja 
pa’ el pastor una zamarra; 
el rabo para correas, 
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